ANÁLISIS | SIGNIFICADO
Cuando éramos jóvenes y la vida comenzaba, todo era diversión y felicidad. Nos aventuramos juntos, fuertes y valientes, tomando oportunidades y continuando adelante. Cantábamos juntos, recordando esos días llenos de sol y fraternidad, sin miedo alguno, descubriendo que anhelábamos más de la vida.
Saltábamos hacia lo salvaje, como si estuviéramos jugando, recordando los mejores días que viven en nuestra memoria. Nos movíamos a nuestro propio ritmo, así es como todo empezó, conectando con lo que verdaderamente sentíamos en nuestro corazón. Solo debemos aferrarnos a esos recuerdos, pues el tiempo avanza pero nuestro amor verdadero crece.
Cada día es una nueva oportunidad, un nuevo comienzo. Todos tenemos amor para dar, esa es la razón por la que vivimos. Recordar el pasado nos llena de nostalgia, pero también de gratitud por esos momentos inolvidables. No dejemos escapar lo que una vez dimos por seguro, manteniendo vivo el amor verdadero que nos llevó a empezar todo.
La vida comenzó con alegría, unidad y la certeza de que cada día trae consigo una nueva oportunidad para amar y vivir plenamente. ¡Recuerda aquellos días cuando la vida apenas comenzaba y sigue adelante con el corazón lleno de amor y gratitud!