ANÁLISIS | SIGNIFICADO
En la melodiosa canción 'Miel, luna y piel' de Virginia Maestro, se habla de la capacidad de perderse una vez más, de marcharse sin necesidad de volver, de alcanzar un punto donde la música nos envuelve y nos invita a seguir bailando. La presencia de esa persona especial provoca que olvidemos incluso respirar, sumergiéndonos en un mar de certezas que nos impulsa a seguir moviéndonos al ritmo de la vida. Las ganas de estar juntos desafían al miedo, invitando a entregarse a la conexión, a la dulzura, a la magia, a la cercanía, sin permitir caídas. Surge el temor de querer aún más, de aferrarse por miedo a perder, a dejar ir la suerte que nos ha unido en un baile eterno que se niega a detenerse.