Interludio (La voz de los sin voces)

LETRA

Interludio (La voz de los sin voces)

En ocasiones solo quiero irme sin despedirme
Pero recuerdo que casi nada puede herirme
Y opto por reírme aunque mal suelo yo sentirme
Por no permitirme ser feliz sin autocorregirme
Pero recuerdo que mi virtud y mi defecto es no ser perfecto
Y nunca demostrar afecto
Quizás peco de egoísta pero piensa mal
Y acertarás frases muy sabias y pesimistas
La cual a veces me ayuda a diferenciar a Judas
Que siempre se muestran pidiendo ayuda
Pero Dios nos dice: "bendice a quien te maldice"
Oídos sordos a palabras necias de infelices
Que solo se alimentan de mis caídas
Pero como todo perro, sé curar yo mis heridas
Y aunque el mal me pida y trate de cerrar salidas
Va guindarse de mi palo para que yo no vele por mi hija
Hay religiones, cultos, cielos e infiernos
Si hablas libre del diablo dicen que muestras los cuernos
Esto parece tierno salido de algún cuaderno
Donde solemos vernos, hablando siempre sin perdernos
No valoramos nada hasta que lo perdemos
Y deseamos siempre tener más de lo que podemos
Y cuando tenemos todo qué hacer con eso no sabemos
Materialmente enriquecemos y mentalmente empobrecemos
Un sabio una vez me dijo:
"Hijo, es mejor deberle a tu conciencia que a un amigo"
Porque tu conciencia se moriría en silencio
Y un amigo en silencio moriría, pues por verte muerto
Esto parece un cuento de esos de la cripta
Sabemos de traiciones pero somos masoquistas
Lo material no es bueno, aún así materialistas
Somos cualquier cosa pero no sinceros, ni realistas
Solo juzgamos, mentimos y engañamos
Sin tan solo pensar en el daño que ocasionamos
Ni en quiénes dañamos solo por beneficiarnos
Y nos arrepentimos solo cuando la muerte está por llevarnos
A veces callamos por creer ser muy prudentes
Pero inconscientes revelamos lo que el alma siente
Hay que ser valiente pa' decir verdades mirando a la gente
Capaz por eso es que me dicen inconsciente, incoherente
Pero no hay que ser vidente
Pa' saber que ya estamos malditos por confiar ciegamente
Palabra errónea, para fieles creyentes
Que apuestan al destino y no a lo que aprenden sus mentes diariamente
Alguien con tres dedos de frente
Es capaz de valorar el aire gratuitamente
Que respiramos e inspiramos a rencor
Que ponga el amor a un lado
Y nos quejamos por sentirnos desolados
Desconsolados, quizás hasta preocupados
Pero nosotros mismos empañamos y martirizamos nuestra paz
Solo por no ser capaz de aceptar nuestros defectos sin culpar a alguien más
Como si los demás están aquí por nosotros
Esto es solo el pensamiento de alguien como pocos
Un sueño reveló mi rostro con apariencia de monstruo
Y dijo que me moriré, muy solo y serio como pocos