Cuando llega

LETRA

Cuando llega

Irrumpió como un rayo de sol en la atmósfera.
Su sonrisa limitaba el elipse,
el eclipse de allá fuera.
"No tengas prisa"
le dije,
"¿O cuántas veces has visto correr un maratón a alguna abuela?"
Sonrió,
después de todo el tiempo,
se fió,
me miró.
El invierno la congeló
y se enfrió la aguja del reloj.
Yo me volví de mimbre.
Atrapados en Noviembre,
hasta que suene el timbre,
de su voz.
Quizá algún yonkie me entienda mejor.
La abeja que no encuentra flor,
no se desanima.
Necesita un dosificador,
la oximetazolina,
que contiene el Utabon,
la mantiene con vida.
No me pidas nada,
no hay caladas de esa droga ya.
Quizás alguna ciencia,
la utilice como cobaya.
No vaya a ser ilegal.
El ministerio advierte:
quererse demasiado,
produce la muerte.
Por abrazos fuertes,
asfixia,
falta de ambiente,
el zumo de amor es la anestesia para tanta gente.
No seré yo quien discrepe,
ni fume eucalipto.
No creo en la familia,
ni las razas,
soy de sandwich mixto.
El mismo que escribió la canción del Obispo.
Pagaría millones por ver a España,
en el lugar de Egipto.
En lugar de vender armas,
a corruptos convictos.
Farsantes ministros,
legionarios de Cristo.
Un tiro en la nuca del mal,
el nuevo orden mundial,
contra "yo ya no aguanto aquí más"
Rebeldes sin patria ni hogar.
Tan sólo el amor y la paz,
total ya todo es temporal,
no existe inserción laboral.
Enchufe es la mejor carrera que tendrás para estudiar.
Amar te va a doler,
luego toser,
será un verbo normal.
Se ligarás,
llorar,
se fusionarán en cualquier día,
no te preocupes,
yo te cubro y subo tu autoestima.
Después de la tormenta,
buscaré tu alma,
si perdimos las flores,
te escribo desde el mar,
el refugio de los soñadores.
No somos pobres,
quizá humildes,
somos la tilde señores,
de revolución.
El acento que otorga la acción,
amarga sensación,
limita con nuestra visión del mundo,
sólo son segundos que no frenan la tensión.
Taquicardias invaden mi corazón.
Y ponlo en verde,
sabes que muero por verte.
Y en ese momento,
hartarme de la suerte,
me divierte.
Soy el fan de tus mofletes,
sabes,
a limón,
no es un sabor,
es una sensación,
que ya me huele fuerte,
como siempre.
No me tientes que caeré.
La mejor marca de sexo que conozco también es tu piel.
Todo acaba en tu epidermis,
soy un obseso,
de eso que llamas besos en exceso,
y yo fusión labial.
Entiendo cada gesto,
y luego el resto de cervezas,
ya harán la función principal.
Besarte en el cuello al final.
Me vuelvo un enfermo mental,
un loco,
y después,
qué dirán.
Acaso qué importa eso ya.
Humano contra humanidad.
Será el egoísmo,
el espejismo de la sociedad.
Quizás uno mismo pueda cambiar,
no esperes que te crean.
Después el tiempo se estropea,
y quién te saborea.
Sé que esa masa arbórea,
entiende mejor que Luís Fans,
el ritmo.
Me quito mi forma de hablar,
quizá nadie entienda esto ya.
Legiones de Cristo,
buscan los niños,
que buscan la verdad.
Suministro,
lados sís,
en cada rima,
domina el lenguaje verbal.
Quien quiera escuchar,
que escuche.
Ya fue tanto por lo que luché,
entre censuras, fisuras de ambulas.
Furia no aplaca mi sed,
de amenazas de fachas privadas,
pintadas,
me hacen más fuerte.
Siempre creceré.

Irrumpió como un rayo de sol en la atmósfera,
su sonrisa limitaba el elipse,
el eclipse de allá fuera.
No tengas prisa,
le dije,
"¿No has visto el caracol tranquilo que nunca se exige?"
Me miró como quien mira a un hijo,
yo le dije,
"Búscale un nombre para que entiendan la situación.
Los hachazos a la lógica no sirven,
si hierven sus cabezas buscando una explicación,
mejor"

Ven,
no tengas miedo,
olvídate.
Que, que no existe un final,
lee entre líneas,
verás,
algo descubrirás.
Sé,
que yo nunca te olvidaré.
Ten,
te regalo mi fe,
en sueños de papel,
ya no la necesitaré.

Ven,
no tengas miedo,
olvídate.
Que, que no existe un final,
lee entre líneas,
verás,
algo descubrirás.
Sé,
que yo nunca te olvidaré.
Ten,
te regalo mi fe,
en sueños de papel,
ya no la necesitaré.