Balada de tolito

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

Tolito es un personaje peculiar que lleva consigo un dado, una paloma, una tos persistente y una copa rebosante de vino. Su ropa está marcada por el polvo de los caminos que ha recorrido, aunque ninguno de ellos conducía a Roma. Es un mago de las cartas y de la sonrisa, un malabarista errante en las plazuelas, con un corazón que se escapa por la camisa y botas que pisan sin prisa ni mediasuela.

El circo de Tolito comienza con cada presentación, atrayendo la atención de todos en el espacio de un asiento de tren. Con un billete de segunda clase y la próxima estación como destino, Tolito logra destacarse por su alma y su larga melena. Su habilidad consiste en desafiar a la tristeza y abrir una ventana a la fantasía.

Para conciliar el sueño, Tolito solo necesita vino, pan y tabaco. Puede tanto rifarte un peine como leer las cartas y sacar el rey de bastos de cualquier lugar insospechado. Si deseas encontrarlo, solo búscalo en el andén, ya que siempre está llegando o partiendo en algún tren.

En sus encuentros con otros viajeros, comparten sus historias y pesares, cuestionando la noche y vaciando botellas hasta lo más profundo. Entre cuatro paredes y dos modestos colchones rescatados de la miseria, intercambian trucos y secretos del arte de moverse de feria en feria.

Así, Tolito brinda un mensaje final pidiendo dos copas más antes de cerrar, reflexionando sobre la muerte como el fin de la caminata. Brinda por la salud hoy, dejando en manos de Dios lo que sucederá mañana.