The Chamber Of 32 Doors

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

En lo alto de las escaleras, Rael se encuentra con una cámara. Es casi una semiesfera con muchas puertas alrededor de su circunferencia. Hay una gran multitud, agrupada en varios grupos. Desde los gritos, Rael aprende que hay 32 puertas, pero solo una que conduce afuera. Sus voces se vuelven cada vez más fuertes hasta que Rael grita '¡Cállense!' Hay un momento de silencio y luego Rael se convierte en el centro de atención mientras dirigen sus consejos y órdenes a su nuevo recluta. Criado con basura, alimentado con cenizas, el maestro del rompecabezas tiene que moverse más rápido. Rael ve un rincón tranquilo y se apresura hacia él.

En lo alto de las escaleras, hay cientos de personas,
Corriendo por todas las puertas.
Intentan encontrar, encontrar ellos mismos una audiencia;
sus deducciones necesitan aplausos.

El hombre rico está frente a mí,
El hombre pobre detrás de mí.
Ellos creen que pueden controlar el juego,
Pero el malabarista tiene otro mazo.

Necesito alguien en quien creer, alguien en quien confiar.
Necesito alguien en quien creer, alguien en quien confiar.

Prefiero confiar en un compatriota que en un urbano,
Puedes juzgar por sus ojos, echar un vistazo si puedes,
Sonreirá a través de su guardia,
La supervivencia entrenada es dura.
Prefiero confiar en un hombre que trabaja con sus manos,
Te mira una vez, sabes que entiende,
No necesita ningún escudo,
Cuando estás en el campo.

Pero aquí abajo,
Estoy tan solo con mi miedo,
Con todo lo que escucho.
Y cada puerta por la que he pasado
Me trae de vuelta aquí otra vez,
Tengo que encontrar mi propio camino.

El sacerdote y el mago,
Cantando todos los cantos que alguna vez hayan escuchado;
y todos me llaman por mi nombre,
Incluso académicos, buscando la palabra impresa.

Mi padre a mi izquierda,
Mi madre a mi derecha,
Al igual que todos los demás, apuntan
Pero en ningún lado se siente del todo bien.

Y necesito alguien en quien creer, alguien en quien confiar.
Necesito alguien en quien creer, alguien en quien confiar.

Prefiero confiar en un hombre que no grita lo que ha encontrado,
No hay necesidad de vender si estás de vuelta a casa.
Si elijo un lado,
No me llevará a dar una vuelta.

De vuelta dentro
En esta cámara de tantas puertas;
No tengo a dónde, ningún lugar donde esconderme.
Te daría todos mis sueños, si me ayudaras,
A encontrar una puerta
Que no me lleve de nuevo otra vez,
Llévame lejos.