Not Dark Yet

ANÁLISIS | SIGNIFICADO

Las sombras caen suavemente a mi alrededor mientras he pasado todo el día aquí, la ardiente calidez me impide conciliar el sueño y siento que el tiempo se escapa rápidamente. Mi alma parece endurecerse, marcada por viejas cicatrices que el sol no pudo sanar. Me siento sin espacio, sin pertenencia, en un lugar donde todavía no reina la oscuridad, pero su pronto advenimiento se hace tangible.

Observo cómo mi empatía y comprensión hacia la humanidad se desvanecen, como si detrás de cada belleza hubiera sido sembrada alguna semilla de dolor. Una carta amable llega a mis manos, las palabras escritas con ternura pero ¿por qué debería importarme realmente? A pesar de que la noche aún no ha caído por completo, su llegada se siente inminente.

He paseado por Londres y París, he seguido los ríos hasta encontrarme con el mar, sumergiéndome en un torbellino de mentiras que me ha llevado al límite. Ya no busco respuestas en las miradas de los demás, a veces siento que mi carga es abrumadora, aunque la oscuridad no acabe de envolverme por completo.

Nací aquí y sé que moriré aquí, en un destino que parece predestinado en contra de mi voluntad. Cada fibra de mi ser se siente expuesta y entumecida, incapaz de recordar cuál era mi propósito al llegar a este punto. El susurro de una oración ni siquiera logra alcanzar mis oídos mientras, poco a poco, la oscuridad se va apoderando de todo a mi alrededor.