ANÁLISIS | SIGNIFICADO
Cuando era pequeño, solía creer en cosas curiosas como que si cruzaba mucho los ojos podría quedarme ciego, o que los deseos podían cumplirse si mis pestañas tocaban mis mejillas. También pensaba que los adultos siempre decían la verdad y, durante los viajes en coche por la noche, imaginaba que la luna me perseguía.
Pero, ¿qué ha cambiado desde entonces? Poco, la verdad. Sigo manteniendo las mismas preguntas abiertas en mi mente. Me decían que entendería todo más adelante, pero ahora que ese 'más tarde' llegó, sigo sin comprender del todo.
De niño, escuchaba a un monstruo vivir bajo mi casa y temía terminar en lava si no cruzaba por el paso de peatones. También creía que las fotos antiguas eran sin color y que un beso de mi madre tenía poderes curativos.
Hoy día, mientras rasco un billete de lotería y sueño con ser millonario, pienso que todo irá bien si sonrío a la cajera del banco. También me digo a mí mismo que si espero lo suficiente, alguien vendrá a lavar los platos por mí, y que, aunque envejezca, mis padres serán inmortales para siempre.
Las cosas han cambiado poco, las incógnitas siguen sin respuesta. Me repetían que entendería más adelante, pero ahora que ese 'más tarde' ha llegado, sigo sin comprender completamente.
Más tarde, más tarde, más tarde...